Las oficinas son espacios que la gente suele encontrar soso y aburrido. No sólo porque los relacionan con el trabajo que necesita ser hecho, sino por las muchas horas de nosotros estamos desesperadamente contando hasta ese momento maravilloso cuando la pequeña asa en ese reloj marque 5. Pero si lo que tenemos fuese una oficina con las áreas que nos recuerdan nuestra casa? Nos sentiríamos más relajados y productivos? Morgan Lovell architects jugaron con esta idea en el diseño de la oficina Rackspace, una empresa de alojamiento web. Cada planta representa un área que por lo general consiste de una casa. Desde la planta baja, que representa a un garaje, hasta el último piso que es un jardín artificial iluminado por un ventanal enorme, Povell ha puesto todos los detalles para su uso.
Dieron a cada piso un tema diferente inspirado en la 'casa de la familia', pero con un poco de estilo. La planta baja representa un garaje, con su propio personalizado Mini Cooper. La primera planta se convirtió en un salón inspirado en los años 70 para reuniones, con las sillas situadas alrededor de una chimenea artificial. La segunda planta, también es perfecta para las reuniones, y se convirtió en la biblioteca, incluyendo las sillas de cuero oscuro, largas mesas de caoba y estantes para libros. El jardín, decorado con terrazas y césped falso, se encuentra en el tercer piso junto a la sala de juntas, una réplica exacta del número 10 de Downing Street.
Para la empresa, el edificio se mantuvo fiel a sus valores y la variedad de espacio de trabajo significa que nunca falta la inspiración. Para el personal enérgico y creativo, que es un lugar al que puede llegar todos los días y siempre sentirse como en casa ... literalmente.
Disfruta de las fotos, estamos seguros de qué le encantarán!
Es probable que logre notar un patrón en estas fotos - todo lo que hay aquí es muy ... británico. Hay una verdadera Morris Mini en el garaje, que es un coche de declaración británica, hay bobbies y botas de teléfono en los fondos de pantalla, pero esté preparado para lo que viene después. En el segundo piso, que sirve para la celebración de reuniones, una sala de reuniones. Nada raro, se podría decir. Pero, ¿y si decimos que la sala de reuniones se ve como número 10 de Downing Street? Debe haber algo muy importante pasando ahí, y Povell ha logrado poner el acento en una habitación sencilla, por lo general aburrida. Encuentro con este post una patria británica monumental. Toda una idea original e interesante, ¿no crees?