Terminada en 2013, esta moderna casa está situada en el borde de un gran bosque de pinos en Seignosse, Francia, y cuenta con una fachada atemporal Bauhaus.
Frente al mar, la casa contrasta con su entorno por sus volúmenes ortogonales y blanco. Abierto a la naturaleza, su fachada protege la intimidad de sus propietarios en la calle lateral.
Un gran salón reúne una cocina abierta y un espacio de oficina flexible, asà como una chimenea en el centro de una fachada acristalada. Una gran cubierta de madera se extiende en el espacio interior hacia el jardÃn, y a la piscina. Arriba, el dormitorio principal cuenta con una vista de 360 °, con una terraza al sur y un baño grande.
Las fachadas Bauhaus, son como congelar su arquitectura en una zona atemporal. Este vocabulario arquitectónico sólido y elegante puede ayudar frente a la naturaleza siempre cambiante, desde las olas de surf y los verdes pinos.
