Unos delicados doseles o mosquiteras también pueden formar parte de la ambientación de un salón, pues una zona de estar en cualquier casa podría adquirir ese encanto bohemio que brinda el uso de estos clásicos accesorios.
Los doseles, son básicamente un ornamento, que se instala sobre camas, generalmente, formando un techo, una cubierta, y de él se cuelgan cortinas, telas que dan un efecto muy atractivo a un interior. Todo tipo de dormitorios, con decoración moderna, rústica, minimalista, etc. podría incorporar un dosel, y en todos éstos ganarán un importante protagonismo.
Lo mismo ocurre, si se usan estos accesorios en otras estancias de una casa, por ejemplo, en salones, y tomando como elemento principal a destacar un sillón o una cómoda butaca.
El efecto que se consigue luego de integrar un dosel o mosquietos a la decoración, se puede ver a simple vista, es encantador y súper romántico. Primero habrá que escoger la zona de la sala donde colgar el dosel, como dijimos, es muy interesante el efecto que se logra colocándolo sobre un diván, un sofá, o un incluso una litera adaptada a asiento en un living.
Luego, hay que instalar, ganchos u otros soportes que sirvan para colgar cortinados del techo. Estas cortinas, deben caer generosamente, rodeando el mueble elegido, en el caso de las imágenes, se ve como las telas abrazan los laterales de los sillones.
Unas colgaduras largas y vaporosas, telas ligeras o espesas, que se puedan recoger a los lados, y mejor si escogemos textiles en colores pálidos, blancos, tonos pasteles, para que se pueda recrear una atmósfera relajante y elegante al mismo tiempo.
Muchos almohadones, cojines con volantes, mantas, detalles vintage, muebles con acabados rústicos, blancos y pátinas, un conjunto muy conveniente para recrear una atmósfera Shabby Chic, sin que falte, por supuesto, la belleza y atractivo de un dosel sobre el sillón del salón.
