La pintura de paredes no es algo complicado si por ejemplo sabemos que los colores más claros o neutros son los que harán que cualquier habitación parezca más grande o si tenemos en cuenta que los colores vivos pueden aportar otra “energÃa” dependiendo de cuál elegimos.
Antes de elegir un color o un tono que pensemos que nos va a ir bién hemos de tener en cuenta que el espacio de la estancia o habitación a pintar es lo más importante ya que si por ejemplo tenemos un dormitorio pequeño y lo pintamos de un color intenso como el rojo, reduciremos mucho su tamaño.Es por ello que si hemos de elegir colores que sean muy oscuros o que sea claramente cálidos, elijamos pintar tan solo una pared con ellos y el resto en blanco o en un tono que sea más claro. De este modo podemos conseguir que nuestra habitación se vea moderna y además que no sea de un solo color rompiendo asà un estilo que puede parecer muy monótono.Además del espacio, la elección de color de las paredes también irán en función de la luz natural que entre por la ventana ya que esta puede hacer que las paredes se vean más o menos iluminadas y que a la vez si sabemos sacarle partido, podamos conseguir que tengamos más espacio en aquellos que sean pequeños.Por otro lado tenemos que tener en cuenta los elementos que se encuentren en las paredes o que vayamos a colocar una vez las tengamos pintadas. Si por ejemplo deseamos que un cuadro destaque y este es de colores vivos y variados, que mejor que hacerlo con una pared en blanco.Si por otro lado deseamos que elementos como radiadores , las molduras o los zocalos queden “tapados” también elegiremos un color que sea como el de estos, y que suelen ser en blanco, para poder conseguir que no destaquen tanto en el aspecto general de la habitación.
Estas son algunas de las pautas a seguir para lograr que la elección de la pintura de las paredes sea la adecuada, pero además podemos elegir el color en función de otros elementos que para algunas personas serán importantes como el conseguir un estado de ánimo o una “energÃa”.
Podemos decir que lo de la elección de los colores en función de la energÃa que aporten corresponde a una creencia o tecnica relacionada con el feng-shui.De este modo podemos decir que existen determinados colores con los que vamos a poder modificar nuestro estado de ánimo para sentirnos con mayor vitalidad o relajados si elegimos determinado color.En general las personas nerviosas, o que tienen tendencia a ponerse nerviosas deberán evitar entonces pintar las paredes en colores como rojos, amarillos, anaranjados o muy vivos y apostar por los neutros.Las personas tÃmidas o aquellas con tendencia a la depresión deberán evitar entonces los colores que sean negros, azules oscuros o los tonos grisaceos.Los colores más cálidos como los salmones, amarillos, o tonos luminosos pueden estimular el movimiento y resultar adecuados para estas personas.
